Despierta
corazón,
desvela ese
sueño dormido
en tus
altares,
en el
inquieto rincón
de mi
almohada.
Sabes que
las noches
que ella
enfría en otra cama,
insomnes nos angustian ,
haciendo un
dibujo de soledad.
Tu nombre
tendido
en mi
delantal
sigue
pendiente de sus manos
tiernas,
frágiles,
amantes de
caricias.
Más temprano
que tarde,
mis letras
la recorrerán,
Perdiendo de
vista
pecados
besos
inmorales
conjuros
labios .
Su nombre
envuelto en flores
atesora un
camino
primaveral .
Mis ojos de
cielo desean verla
abrazadas a
la retina
y al retoño
de los dos.
Cesar
Galbarini
Saludos Chino! qué alegría ver que estás escribiendo así
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